El 2 de junio de 1810, fue fundando, por la Primera Junta de Gobierno, el diario conocido como La Gazeta de Bunos Aires, mediante un decreto que establecía que "el pueblo tiene derecho a saber la conducta de sus representantes". Su primer número apareció el jueves 7 de ese mes, fecha que luego fue elegida como el Día del Periodista. El lema de la Gazeta era "Tiempos de rara felicidad son aquellos en los cuales se puede sentir lo que se desea y es lícito decirlo".
Tiempos de rara felicidad son pues los presentes en los cuales la Cámara Segunda en lo Civil, Comercial y de Minas de la Provincia resuelve “hacer lugar a la medida cautelar innovativa interpuesta por el señor Néstor Gabriel Bosetti (vice gobernador) en contra del señor Julio Laboranti”, a quién lo limitan a referirse al Vicegobernador. Mientras tanto, en Aimogasta, el periodista radial Ariel Pato Nuñez, titular de FM Argentina 103.5, es amenazado y violentado, tras hacer una denuncia pública contra el gobierno municipal. La luneta de su auto fue destrozada, y junto a la piedra que impactó con el vidrio encontró una nota que decía: “es una advertencia”.
Tiempos de rara felicidad en la medida en la que el Protocolo Antipiquetes, la normativa que aprobó el Consejo de Seguridad Interior para el accionar de las fuerzas de seguridad ante manifestaciones, señala que "la participación de los medios de comunicación se organizará de modo tal que, los periodistas, comunicadores y los miembros de sus equipos de trabajo desarrollen su labor informativa en una zona de ubicación determinada, donde se garantice la protección de su integridad física, y no interfieran con el procedimiento".
Lejanos están los tiempos, en lo que nacía nuestra patria, y los medios y periodistas se proponían "el pueblo tiene derecho a saber la conducta de sus representantes". Pero aunque esos tiempos están lejanos, a nuestros gobernantes les decimos…SIGUE SIENDO UN DERECHO DEL PUEBLO SABER SOBRE SUS CONDUCTAS, para ello está el oficio del periodismo.
Hoy, en este Día del periodista, Radio Voces quiere no solo solidarizarse con aquellos que ejercen el diariamente el periodismo y se han visto limitados en dicho ejercicio, sino sobre todo hacer un llamado a los propios periodistas y comunicadores de reflexionar respecto al rol que cumplimos, quienes informamos respecto a los sucesos cotidianos. En este sentido no podemos dejar de repudiar la forma de hacer “periodismo” del Sr Laboranti (aunque creemos que la censura ejercida contra él sienta un peligroso precedente), y otras actitudes comunicacionales como la del personaje Dr. Abolengo, quien se refirió a las mujeres que denuncian violencia machista como “trolitas”.
La comunicación no solo no es objetiva, sino que está cargada de simbolismos, prejuicios, intereses. Como medio de comunicación, que tiene ya 8 años en el aire, siendo autogestionado por quienes lo creamos y ponemos al aire diariamente, asumimos con política referencia el legado de Alipio Tito Paoletti quien nos dice que “un periodista es un hombre que anda por la vida sin miedos y sin armas, que confía en el pueblo y asume como compromiso irrenunciable la defensa de los valores permanentes de la comunidad frente a los grupos humanos que no tienen más ley, lisa y llanamente, que el poder que otorga la fuerza”.
Es por ello que en este 7 de Junio, queremos hacer un llamo a los y las comunicadores y comunicadoras de La Rioja. Como tales no solo podemos aportar a la construcción de una sociedad, una democracia más digna, sino que tenemos la responsabilidad de hacerlo desnaturalizado prejuicios y valores que nos in-dignan, nos enfrentan y degradan como ciudadanía. Además queremos denunciar y repudiar las acciones de quienes tienen el poder político, que ofrecen desayunos y almuerzos para celebrar nuestro oficio, mientras censuran y amenazan.
