NOTA CON AUDIO: Hace más de un mes, estudiantes y docentes del ISFD "Perdo I. de Castro Barros" lucha por recuperar su edificio histporico. Un edificio que hoy alberga diferentes emprendimientos comerciales donde históricamente funcionó la Escuela Normal.
Mientras los chicos reclaman aulas, y un edificio en condisiones, el
titular de la cartera de Cultura, Pedro Agost, ratificó el apoyo a la
refuncionalización instrumentada en la Escuela Normal, que alberga hoy al "Paseo
Cultural Castro Barros", y aseguró que es "un espacio donde el Gobierno
Provincial despliega una importante política cultural de inclusión", y consideró que llamar centro comercial al Paseo Cultural “está
destinado políticamente a alterar las emociones de los ciudadanos, calentar el
ambiente político y conseguir reclamos que son canalizados en este sentido”.
Radio Voces dialogó al respecto con la artísta plastic, docente y miembro de la Red de Artistas independientes Natacha Avellaneda. "No entendemos a qué se refiere el Secretario de
Cultura sobre las supuestas políticas de inclusión que se implementan
desde el Paseo Cultural. En ese lugar exponen sólo algunxs artistas.
Los representantes de la cultura popular eligen no exponer ahí porque no
legitiman el saqueo a la educación y la cultura que se hizo cuando se
sacó la escuela normal de ese edificio para convertirlo en un paseo
comercial. Digan lo que digan, es eso, un paseo comercial", aseveró Avellaneda, quién egerce como docente de arte en la Escuela Polivalente de artes hace más de 10 años.
Con respecto a
la refuncionalización que se hizo del lugar Avellaneda explicó que "para la
mayoría de la gente, ese lugar sigue siendo la Escuela Normal. Es poca
la gente que se refiere a ese lugar como un Paseo cultural. Se usa, más
que nada para actos de gobierno, que son las únicas ocasiones que el
lugar está lleno. Otra actividad que se hace ahí es la Feria del libro,
una vez al año, que también se ha vuelto poco convocante para la
población en general. Y también hay escritores y dueños de editoriales y
librerías que tampoco quieren tener un stand en la feria del libro
mientras se haga ahí. Los integrantes del Ateneo cultural, que defienden
el lugar son 10 personas que no son representativas. Y, repito,
el paseo está vacío la mayor parte del año. Y, a pesar de ser un espacio
público, lo manejan como si ya le perteneciera a alguien, como si fuera
privado".
Una vez más el debate respecto al partiminoo cultural e histórico de La Rioja ha sido pueso en el centro de la escena por la lucha de una comunidad que no quiere perder identidad detrás de lujosas ofertas de marquesina
